El tubo de carga conectado a la toma de agua introduce agua en el interior de la lavadora, que es calentada por las resistencias. La temperatura del agua, que puede ser regulada de 0° a 90°C gracias a un termostato, se determina según el ciclo de lavado elegido, girando el mando de ajuste de temperaturas. Combiwash es el sistema de lavado adoptado en la mayoría de modelos de lavadoras Candy. Con este sistema la bomba de carga recoge del fondo el agua calentada con el detergente y la lleva a través de una tubería hacia el interior del tambor, dejándola caer desde arriba directamente sobre las prendas. La bomba de descarga, al final del ciclo de lavado, elimina el agua utilizada para el último aclarado y, tras unos minutos, se desactiva el dispositivo de seguridad que impide la apertura de la puerta.
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